I will Survive
Después de mucho tiempo alejada de las tablas, más específicamente, de las tablas de un pub, el martes pasado salimos con mis amigos del lab a recorrer el mundo nocturno del Concepción de mitad de semana. Increíble, pero existe gente carreteando durante días hábiles. Y pensar que en la Antigüedad yo solía salir de parranda y al otro día seguir con la cabeza en alto como si nada. Las cosas ahora han cambiado un poquito y el día siguiente a un carrete se hace agotador y extenuante. Esa noche conocí Acapulco, no el Acapulco de Luis Miguel, ni el de los clavadistas bronceados que se encomiendan a la Virgencita de Guadalupe antes de cada salto. No, conocí el Acapulco hecho de Ron, Piña; Curazao y quién sabe qué otra cosa. Gracioso trago azul fluorescente como los del PuroChilestucieloazulado. Y pensando en la Virgencita, tal vez hubiera sido bueno que me hubiera encomendado antes de empezar a tomar.Buscando en Google (qué gran invento!) encontré y cito: "El alcohol relaja el cerebro y el cuerpo...la ingestión moderada de alcohol ayuda a aliviar el estrés, favorece la relajación y estimula el apetito." Hasta ahí ibamos bien, nuestras vidas científicas permanecen en un constante estado de tensión y estrés, así que relajar el parénquima cerebral y la mente no viene nada mal. Primer Acapulco y buena conversación (eramos 9 ó 10 personas), cosas graciosas, risas, todo bien. Segundo Acapulco, aprovechando el 2x1 o Japiauer, todo sigue perfecto, la gente cada vez más animada, pero comienzan a retirarse, hasta que quedamos 4 valientes. Con respecto a las recomendaciones en el consumo de alcohol: "Beber todo el límite semanal en una sesión puede llevar a una mala coordinación, vómitos, reacciones emocionales exageradas..." Tercer Acapulco y la mitad de un Cuarto... leves problemas de coordinación; como lady, no vomito (punto a mi favor) y lo de las emociones no me atañe porque soy un ser frío, calculador y des-emocional jajajaja. Ahora, no dicen nada de la desinhibición, pero yo les puedo decir algo: terminar cantando "I will survive" de la gran Gloria Gaynor ("apagar fuego, apagar fuego", Viña del Mar, algún año de la década 70 u 80) para mi al menos, es realmente un acto de desinhibición... qué opinas tú Pame??
Siguiente etapa: "Una consecuencia habitual de excederse con la bebida una noche es la resaca del día siguiente (dolor de cabeza, boca seca, sensación de malestar y cansancio)". A esto puedo añadir el desbalance el oído medio cuando se gira rápidamente la cabeza.
Resumiendo, lo pasé genial y espero que volvamos a repetir estas salidas, aunque para la próxima vez evitaré las toxicidades del alcohol, o por lo menos, distribuiré mejor la cuota. Y por un buen tiempo... no más putos tragos de colores!







